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Durante abril la Unidad de Restitución de Tierras realizará la entrega a sus legítimos dueños de predios ubicados en Cocorná, San Calos y Nariño. En los 23 municipios del Oriente ya son 1.400 decisiones similares adoptadas por los jueces.

Uno de esos casos es el de un hombre, campesino oriundo del municipio de Argelia, quien luego de un desplazamiento forzado se instaló en la vereda la Española de Nariño, en donde se casó también celebró una compra venda de un predio de un poco más de 17 hectáreas el cual trabajó hasta el 2003, cuando el frente 47 de las Farc, en su intención de frenar el avance del Ejército, sembró el terreno con minas antipersona.

Gracias a los procesos de desminado humanitario en este municipio y al acompañamiento brindado por los abogados de la URT Antioquia, el Juzgado Primero Civil del Circuito Especializado en Restitución de Tierras accedió a sus pretensiones de restitución, además de otorgarle otra serie de medidas complementarias para garantizar un retorno digno a su tierra.

 

Cocorná 

En otro caso, el Juzgado Civil del Circuito Especializado en Restitución de Tierras Itinerante de Tierras de Antioquia amparó el derecho a la restitución de José*, un desmovilizado del EPL que compró un predio en 1996 en la vereda Trinidad de Cocorná y un año después, como parte de la ofensiva de los paramilitares de Ramón Isaza, fue desplazado de su terreno.

Luego de dar a conocer su caso ante los abogados de la URT Antioquia, quienes le brindaron el acompañamiento judicial, el Juzgado Civil del Circuito Especializado en Restitución de Tierras Itinerante de Antioquia amparó el derecho a la restitución de José. Además, el Juez ordenó priorizarlo para subsidio de vivienda e incluirlo en el programa de proyectos productivos de la Unidad.

De otro lado, este mismo despacho judicial decidió restituir a la familia Taborda un predio de 17 hectáreas + 3.444 mts2, ubicado en la vereda San Blas, municipio de San Carlos. Se trata de una familia de colonos que arribaron a esta región del oriente de Antioquia a mediados de los 70 y se instalaron en un pedazo de tierra baldía que, desde sus inicios, destinaron a labores agrícolas y ganaderas. Allí crecieron los hijos de la familia Taborda y vivieron tranquilos hasta la década de los 90, cuando el conflicto armado se recrudeció en este territorio.

La presencia de las guerrillas, primero, y de los grupos paramilitares después, generó varios episodios de desplazamientos forzados masivos en la vereda. Los Taborda abandonaron su tierra un par de veces y regresaron a ella con la esperanza de que la situación de orden público mejorara. Pero la intención de reclutar a uno de los hijos de la familia por parte de uno de los actores en conflicto llevó a la familia Taborda a abandonar su finca y malvenderla en 1996.

Al valorar las pruebas presentadas por los abogados de la URT Antioquia, el Juez no solo accedió a las pretensiones de restitución de la familia solicitante; también le ordenó a la Agencia Nacional de Tierras formalizar y adjudicar el predio en cuestión, además de priorizarlos para subsidio de vivienda y entrega de proyecto productivo.

 

Conflicto en el Oriente Antioqueño

Sin duda alguna, el Oriente Antioqueño, una de las regiones más golpeadas por el conflicto armado en el departamento, es también el territorio donde más se han sentido la acción de la URT Antioquia. Desde la vigencia de la Ley 1448, los jueces de tierras han proferido 1.489 sentencias, que a su vez corresponde al 72 por ciento de todas las decisiones adoptadas por los despachos.

A su vez, la URT Antioquia ha invertido unos $20.723.465.410 en proyectos productivos en esta región, poco más del 70 por ciento de recursos destinados a los 105 municipios que atiende esta Dirección Territorial. Con lo anterior, la URT continúa fortaleciendo los procesos de transformación territorial y consolidación de la paz en el Oriente Antioqueño.