Hoy, a través de nuestra tradicional columna, les dejamos nuevamente la invitación que siempre les hacemos cada que hay una elección en nuestro país: Ojo con el voto. Confíe su elección en aquellos que le garanticen experiencia, propuestas claras y realizables, que tengan hojas de vida íntegras, que le hayan servido a sus comunidades, y sobre todo, que le generen confianza.
Es muy común por estas épocas tener un amplio ramillete de opciones para tomar la decisión de por quién votar; y también es muy común que todos se vuelvan saludadores, abrazadores, conversadores y prometedores. Pero más allá de eso, lo que los ciudadanos deben tener en cuenta son los perfiles de cada una de esas personas, su experiencia, su pasado y sus gestiones. ¿Quiénes son? ¿Qué han hecho por la comunidad? ¿en qué espacios se han desempeñado? ¿Quiénes los rodean? ¿Qué tipo de gestiones han realizado en bienestar de los demás? ¿Cuáles son sus pecados?
Si logramos resolver estas inquietudes tendremos muchas más herramientas a la hora de depositar nuestro voto, y, sobre todo, habremos hecho un ejercicio responsable y consciente como ciudadanos, que sin duda se tendrá que ver reflejado con el desarrollo de nuestras ciudades, departamentos y municipios.
Y aunque seguramente habrá muchos que para evitarse la fatiga prefieran no votar o dejar que otros hagan la tarea, vale la pena recordar que es un deber que tenemos como ciudadanos activos, como seres sintientes, razonables y pensantes, y porque además esos gobernantes que se elijan el próximo 29 de octubre serán los encargados de regir los destinos de nuestros territorios durante los próximos 4 años. Ya en algunas oportunidades y en algunas zonas del país nos hemos equivocado, por eso, ¡ojo con el voto!, para que no nos volvamos a equivocar, y por el contrario, respaldemos aquellos gobiernos y equipos donde sí hemos sido acertados.
Recuerden además que el día de las elecciones serán varios los votos que habrá que depositar, porque ese día se eligen Gobernadores, Alcaldes, Diputados, Concejales, y en algunas partes, ediles de las JAL.
Por: Oscar Morales Orozco
