Aunque parezca curioso, en el Oriente Antioqueño no hay mano de obra para desarrollar ciertas actividades, especialmente en la zona productiva. Al dialogar con los gremios y las agencias de empleos, se queda uno sorprendido al saber que esta región, que tiene un significativo crecimiento en todos los ámbitos, escasea la mano de obra para la construcción, la agricultura, la manufactura, la floricultura, aseo, bodegaje, logística y las áreas metalmecánicas, entre otras.
Lo paradójico del asunto, es que, según Carolina Rincón, directora de la Agencia de Empleo de Rionegro, “no sólo a esta Agencia, sino a las de Comfama, Comfenalco y el Sena, todos los días llegan personas a radicar sus hojas de vida; lo que indica que sigue habiendo desempleo en la región, pero al final no quieren trabajar en la oferta que se está generando”.
En los recientes análisis del Observatorio de Empleo del Oriente Antioqueño, conformado por gremios, academia, Estado y organizaciones sociales, se considera que este tipo de fenómeno se estaría dando porque la mayoría de ciudadanos se están preparando académicamente para labores profesionales, directivas y administrativas, y no tanto para mano de obra en la cadena productiva. “Hay un desajuste en el mercado laboral; o sea, no conversan las expectativas de las empresas en la región, frente al sector productivo existente” añade Carolina Rincón.
Cifras de la Cámara de Comercio del Oriente Antioqueño, indican que en los últimos 12 años en nuestra región la creación de empresas creció en un 121%, ya que en el 2011 había 10.336 empresas, y el año 2022 cerró con 22.883. La anterior cifra ha hecho que la oferta laboral crezca, pero ante la falta de trabajadores para labores técnicas, productivas y operativas, muchas de estas empresas han debido traer a sus empleados desde Medellín, el Valle de Aburrá, e incluso, de otras zonas de Antioquia y el país.
El DANE indica que la población de la región creció en un 26%, pues mientras en el año 2011 había 569.591 habitantes, para el año 2022 en los 23 municipios del Oriente se tenía un registro aproximado de 717.384 pobladores.
Así mismo, un estudio de la Gobernación de Antioquia señala que en esta región hubo una reducción del 3.5% en la pobreza, toda vez que en el 2013 un 20.9% de la población era pobre, y en el año 2022 esa cifra llegó al 17.4%.
Con todo esto, se evidencian dos grandes retos: El primero es que las instituciones educativas también se enfoquen en preparar a sus estudiantes para el sector productivo, como bien lo hace el SENA y que lo reforzará con su nueva sede regional en La Ceja.
Y el segundo factor, es que las empresas mejoren sus condiciones hacia los empleados, ya que “deben dar mayores garantías en términos salariales y condiciones de bienestar laboral, pues el salario mínimo no está muy ajustado al costo de vida y al desarrollo de la región, mientras que en la informalidad las personas consideran que pueden sacarse ese salario mínimo sin necesidad de cumplir horarios. El reto es voltear ese fenómeno hacia la formalidad y el empleo” concluye Carolina Rincón.
Por: Oscar Morales Orozco
